05 octubre 2010

Adolescentes chilenos son los que más consideran a sus padres para hablar de sexo en Latinoamérica

Los adolescentes quieren no sólo que los eduquen en el tema, sino que escuchen lo que sienten y lo que les pasa. No que les digan lo que está bien o mal.
Hace una semana, la experta en adolescentes Verónica Gaete estuvo a la cabeza de un foro donde 300 estudiantes de colegios de siete comunas de Santiago debatieron sobre temas de sexualidad. Ella ya había escuchado muchos de los temas que salieron ahí, pero uno le llamó la atención: el llamado de los jóvenes a que sus padres estuvieran más dispuestos a conversar sobre sexo. "Ellos expusieron mucho la necesidad de que los padres estén más presentes en su vida sexual no sólo educando, sino aceptando mejor sus conductas sexuales para que pudieran hablarlas abiertamente", cuenta la doctora del Centro Ser Joven y de Clínica Las Condes.
Puede leerse como algo contradictorio: la adolescencia es una etapa donde los jóvenes buscan marcar distancia de sus padres. "Pero que estén en camino de la autonomía no tiene que ver con la necesidad de comunicarse con los padres", explica Gaete. Es precisamente lo que se lee en un estudio de Bayer y GfK que explora actitudes de los jóvenes hacia el sexo y la anticoncepción en casi 4.000 jóvenes en Asia Pacífico, Europa y América del Norte y 1.414 jóvenes de siete países de Latinoamérica: México, Brasil, Venezuela, Colombia, Perú, Argentina y Chile. Una de sus conclusiones es que los jóvenes chilenos (84%) son los que más consideran a sus padres para hablar de sexo en la región, seguidos de los argentinos (79%) y mexicanos (73%).
Verónica Gaete explica que los adolescentes chilenos tienen instalada la idea de que los padres son un referente en este tema. "Los tienen validados como fuente confiable", dice. Son dos polos que se están acercando: otro dato dice que el 29,5% de los adolescentes chilenos estima que siempre debería hablar temas de sexualidad con los padres (el promedio latinamericano es de 25%). Las encuestas muestran que los chilenos, en general, tienen una alta valoración de la familia. Y los adolescentes no escapan a eso. "La familia es un lugar de acogida, contención y calma. Más ahora, que el contexto ha cambiado, hay una menor rigidez interna. Los adolescentes valoran eso", explica Ladislao Lira, sicólogo clínico infanto-juvenil. Y con ese cambio de contexto, dice Lira, hoy, a diferencia de años atrás, los adolescentes sí expresan esa necesidad de acercarse a sus padres a hablarles de temas que antes eran inimaginables y los toman como referente. "Los van a buscar para que escuchen lo que sienten y lo que les pasa, no para que les digan que esto está bien y esto otro mal", insiste Lira.
Gaete lo ve en su consulta. "Cada vez hay más papás que sí son capaces de educar en sexualidad. Pero lo hacen principalmente antes de que los chiquillos comiencen su actividad sexual". Es que aún hay una brecha entre la disposición a hablar y hacerlo realmente. Los estudios y la evidencia en consulta demuestran que una vez que ellos comienzan su actividad sexual se hace más difícil el diálogo. ¿Por qué? Porque contar en qué están es lo que más les cuesta a los adolescentes. Y en la otra vereda, hay pocos papás que se lo toman con tranquilidad: "La mayoría hace una mini crisis con esto", dice Gaete. Para los padres, tampoco es fácil el camino hacia el entendimiento. Hay dos componentes en esa reacción: uno, el mensaje de que sus hijos ya no son niños o que están haciendo cosas de grandes. Y segundo, el miedo a que resulten dañados emocionalmente o por un embarazo no planificado.
Pero después de esa mini crisis, explica la especialista, si los padres son acompañados en el proceso, son muy capaces de revertir ese rechazo inicial a que sus hijos estén teniendo relaciones sexuales. "Es que prima el bien común, el interés en el hijo, pese a que puede no gustarles lo que ellos están haciendo o que hubiesen querido algo distinto", concluye Gaete.

Fuente original: http://diario.latercera.com/2010/10/03/01/contenido/tendencias/16-40401-9-adolescentes-chilenos-son-los-que-mas-consideran-a-sus-padres-para-hablar-de.shtml

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